La buena vida
Siempre alguno tiene que ser el primero y puesto que anoche salí a tomar algo y paseando desemboqué allí, pues empiezo por este.
Situado en la Plaza Santa Catalina, es una cervecería alemana. Al principio puede costar verlo, puesto que su entrada principal da a la placita que desemboca a la C/ Gavacha, pero si te fijas bien, verás que justo al lado de Aromas, hay una puerta que te permite entrar.
Es un sitio pequeño con el espacio muy bien aprovechado. Con una decoración acogedora y con unas paredes hechas de piedra. Tiene una barra donde también se pueden pedir cervezas y tomar alguna de sus tapas.
Los baños sorprenden con su grifo de agua imitando a un tirador de cerveza.
Soy una incondicional de la Bittburger, su cerveza rubia (de todos modos hay muchisimas más) y mientars leo la carta siempre la pido lo primero porque me la sirven bien fresquita y con un plato de aceitunas (que porque no decirlo, también me gustan).
De sus tapas recomendaría, el hojaldre de verduras, el codillo, el arrejuntao (es una versión fusión del clasico "matrimonio" murciano), el rollito de salmón...
Tiene una carta bastante amplia de tapas y platos y por supuesto sus ensaladas están todas buenisimas. Eso sí, tienen dos tamaños, y el pequeño ya es bastante generoso.
Los postres son bastante golosillos, pero la pena es que cuando ya termino de comer, ya no me queda espacio para probarlos, pero aun así, cuando los veo pasar tienen una pinta estupendisima.
Creo que es un sitio estupendo para quedar un día entre semana con amigos y desconectar un poco del trabajo.
Es imprescindible reservar mesa, porque siempre, sobretodo fines de semana, suele estar lleno, ya que no cuenta con muchas mesas.
Otra cosa importante es que aceptan tickets restaurante y no hay muchos sitios en Murcia que lo hagan (interesante para los que los dispongamos).
Su telefono, para quien lo quiera, es 968 218 501
Situado en la Plaza Santa Catalina, es una cervecería alemana. Al principio puede costar verlo, puesto que su entrada principal da a la placita que desemboca a la C/ Gavacha, pero si te fijas bien, verás que justo al lado de Aromas, hay una puerta que te permite entrar.
Es un sitio pequeño con el espacio muy bien aprovechado. Con una decoración acogedora y con unas paredes hechas de piedra. Tiene una barra donde también se pueden pedir cervezas y tomar alguna de sus tapas.
Los baños sorprenden con su grifo de agua imitando a un tirador de cerveza.
Soy una incondicional de la Bittburger, su cerveza rubia (de todos modos hay muchisimas más) y mientars leo la carta siempre la pido lo primero porque me la sirven bien fresquita y con un plato de aceitunas (que porque no decirlo, también me gustan).
De sus tapas recomendaría, el hojaldre de verduras, el codillo, el arrejuntao (es una versión fusión del clasico "matrimonio" murciano), el rollito de salmón...
Tiene una carta bastante amplia de tapas y platos y por supuesto sus ensaladas están todas buenisimas. Eso sí, tienen dos tamaños, y el pequeño ya es bastante generoso.
Los postres son bastante golosillos, pero la pena es que cuando ya termino de comer, ya no me queda espacio para probarlos, pero aun así, cuando los veo pasar tienen una pinta estupendisima.
Creo que es un sitio estupendo para quedar un día entre semana con amigos y desconectar un poco del trabajo.
Es imprescindible reservar mesa, porque siempre, sobretodo fines de semana, suele estar lleno, ya que no cuenta con muchas mesas.
Otra cosa importante es que aceptan tickets restaurante y no hay muchos sitios en Murcia que lo hagan (interesante para los que los dispongamos).
Su telefono, para quien lo quiera, es 968 218 501
2 comentarios:
comento esta entrada porque ya he oído hablar de 'la buena vida' y como yo no conozco casi ningún sitio voy a adoptar como propósito ir visitando los que recomiendes (siempre que se pueda, claro).
empezaré por este, que tiene muy buena pinta, un nombre muy afortunado, y gana muchos puntos para las personas a las que nos gusta la cerveza.
ya te diré qué me pareció.
m.
Es carísimo y el servicio deja mucho que desear pues la dueña es una tirana y los camareros se le van.
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